Luego de cuatro años y medio, el juicio que tuvo como principal protagonista al exintendente de La Calera, Diego Lorenzetti, llegó a su fin.
Años de intriga y con la opinión pública dividida, el misterioso caso en el que se ventilaron y entremezclaron amantes, drogas y política, culminó este viernes cuando la Justicia decidió el futuro de los tres imputados.
Tras 12 horas de audiencia, el tribunal integrado por José Luis Flores, Silvia Inés Aizpeolea y Jorge Sabaini Zapata emitieron pronunciamiento luego de deliberar durante casi tres horas, al finalizar los alegatos que se extendieron desde las 9:00 hasta las 17:30.
Para la fiscal de cámara, Carolina Monte Riso, Diego Lorenzetti, Edivaldo de Oliveira Pereira y Leandro Vílchez “llevaron adelante el plan para dar muerte a Romina” pero los abogados defensores hicieron hincapié en las irregularidades e ilegalidades cometidas por la instrucción policial.
Durante el juicio oral y público no se expuso ninguna prueba extra a la que ya se había conocido durante la polémica instrucción.
En los alegatos, la primera en hablar fue la fiscal de Cámara, Carolina Monte Riso. Aseguró que las pruebas respaldaban la hipótesis del encargo del crimen de parte del ex intendente de La Calera. Durante más de dos horas, fundamentó la posición en las pericias realizadas y las testimoniales y pidió la condena de prisión perpetua para los tres imputados.
Por otra parte, los tres defensores solicitaron -y de igual manera- la absolución de sus clientes por el beneficio de la duda, ya que no hubo prueba certera.
Finalmente, pasadas las 21 horas del viernes, los jueces resolvieron liberar a Lorenzetti y condenar a los otros dos imputados.
Casi a la media noche, el ex intendente de La Calera salió de la Penitenciaría; abrazó a su hijo y a los amigos que fueron a recibirlo y partió secundado por una gran caravana de autos que transportaban amigos y familiares.
Romina Aguilar fue asesinada el 30 de enero de 2016 cerca de las 6:30 de la mañana en la puerta de su casa. Durante la investigación se barajaron distintas hipótesis, pero la entonces jueza de instrucción, Virginia Palacios, decidió ir contra una de ellas, que llevaba al viudo de la víctima como instigador del crimen, dejando otras teorías sin investigar.
Ahora se abre un nuevo abanico de interrogantes que habrá que desmenuzar con el paso del tiempo. ¿Quedó impune el crimen?.
La Justicia no pudo culpar a Diego Lorenzetti. Si no fue él quien mandó a matar su esposa, ¿quién lo hizo?.
¿Son realmente los autores del hecho De Oliveira Pereira y Vilchez siendo que tampoco se mostraron durante el proceso pruebas concretas contra ellos?
