Mediante un mensaje formal, Stella Maris Lobos invitó -en respuesta al pedido previo de Rosa Calderón- a reunirse en su despacho para coordinar el acto de traspaso de mando.
Esta será la última obra que Lobos inaugure luego de ocho años de gestión en la que fue muy cuestionada, entre otros aspectos, por la intervención en esculturas existentes, por presuntas irregularidades en el manejo de las cuentas públicas, por no resolver la problemática del agua potable ni la del basural a cielo abierto, ni brindar servicios a barrios como "Sierras Marianas", entre otras.
El año pasado Stella Maris Lobos rompió con el Albertismo y se sumó a las filas del Adolfismo, espacio al que el oficialismo llamó "la nueva oposición". Desde allí, con el sello de Juntos por la Gente, se postuló el hijo de Lobos, Cristian Alcaraz, con miras a sucederla en el cargo sin embargo, Rosa Calderón le ganó la pulseada en la elección del 16 de junio donde tras confirmarse el resultado, y en declaraciones exclusivas a este medio, Alcaráz analizó y reconoció: "Hay una parte de voto castigo a la gestión de 8 años" (ver archivo).